lunes, 13 de abril de 2015

Nuestro propio Don Quijote

Hola; en los comentarios crearemos un relato en el que crearemos nuestro don Quijote particular. 

Estos son los criterios:

1. Debemos respetar la estructura de los cuentos. Esto quiere decir que debe tener un planteamiento, un nudo y un desenlace. 

2. Debe ser una persona que, escuchando música de temática social (como el rap), decide hacer justicia por sí mismo y hace cosas disparatadas.

3. La extensión debe ser de 15 líneas mínimo. 

4. Los resultados se presentarán en el mismo blog y todos los compañeros deberán realizar una valoración constructiva sobre cada relato. 

Saludos. Pablo.

Buscamos algo sobre Cervantes...

Hola; contesta a las siguientes preguntas en los comentarios, usando las siguientes páginas: 



- Poemas de Cervantes.


Estas son las preguntas: 

1. Fecha de nacimiento y fallecimiento del escritor. 

2. ¿Qué libro le ha hecho famoso?

3. ¿Por qué es famosa esta obra?

4. ¿A qué país huyó? ¿Por qué razón?

5. ¿En qué batalla participó y en qué año? ¿Qué le ocurrió allí?

6. ¿Dónde fue apresado? ¿Cuánto tiempo?

7. ¿En qué fechas comenzó a escribir?

8. ¿A qué se dedicó en Andalucía?

9. ¿En qué año publicó su gran obra?


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10. En los poemas hay un soneto en el que se establece una conversación entre Rocinante y otro caballo. ¿Cuál es su nombre? ¿Quién fue su dueño? ¿De qué trata el diálogo entre ambos? 


Molinos de viento

Hola; lee este capítulo adaptado de El Quijote y observa el vídeo con el videoclip de Mago de Öz. Con esto, realiza un resumen del capítulo y relaciónalo con la canción.

Saludos. Pablo.

Del buen suceso que el valeroso don Quijote tuvo

en la espantable y jamás imaginada aventura

de los molinos de viento


D. Quijote y Sancho iban conversando cuando descubrieron treinta o cuarenta molinos de viento que había en aquel campo, y así como Don Quijote los vio, dijo a su escudero:
- ¿Ves allí, amigo Sancho Panza, donde se descubren treinta o poco más gigantes con quien pienso hacer batalla, y quitarles a todos las vidas, con cuyos despojos comenzaremos a enriquecer.

- ¿Qué gigantes? Dijo Sancho Panza.

- Aquellos que allí ves, respondió su amo, de los brazos largos.

- Respondió Sancho: aquellos que allí se parecen no son gigantes, sino molinos de viento, y lo que en ellos parecen brazos son las aspas, que volteadas del viento hacen andar la piedra del molino.

 - Bien parece, respondió Don Quijote, que no estás cursado en esto de las aventuras; ellos son gigantes, y si tienes miedo quítate de ahí, y ponte en oración que yo voy a entrar con ellos en batalla.
 
 Y en diciendo esto, y encomendándose de todo corazón a su señora Dulcinea, arremetió a todo el galope de Rocinante, y embistió con el primer molino que estaba delante; y dándole una lanzada en el aspa, la volvió el viento con tanta furia, que hizo la lanza pedazos, llevándose tras sí al caballo y al caballero, que fue rodando muy maltrecho por el campo.

 Acudió Sancho Panza a socorrerle a todo el correr de su asno, y cuando llegó, halló que no se podía mover.

 - ¡Válgame Dios! Dijo Sancho; ¿no le dije yo a vuestra merced que mirase bien lo que hacía, que no eran sino molinos de viento, y no los podía ignorar sino quien llevase otros tales en la cabeza?

 Y ayudándole a levantar, y a subir sobre Rocinante, siguieron el camino.